Estudio realizado por las consultoras Paradigma y Grupo Nexe, a líderes de 180 empresas de cinco países, da cuenta de las profundas transformaciones laborales que se han registrado al interior de las organizaciones como efecto del Covid-19, y los alcances y desafíos que están teniendo en las compañías los procesos de teletrabajo y modalidad híbrida.

La necesidad de las empresas de adaptarse al escenario de pandemia para sortear la crisis provocada por el Covid-19, implicó profundas transformaciones al interior de las organizaciones, que en los últimos dos años ha derivado en nuevas formas de trabajo que se han ido consolidado como tendencias y que son fundamentales para la sostenibilidad de las compañías en la etapa postpandemia.

De esos cambios y los desafíos que representan, da cuenta un estudio realizado por las consultoras Paradigma y Grupo Nexe, que se aplicó a 180 empresas de Chile, Argentina, Uruguay, México y España, en áreas como la banca, salud, servicios profesionales y tecnología, consumo masivo y retail, construcción y manufacturas, y educación y agroindustrias, entre otros.

“Dada la importancia en este contexto de la capacidad de adaptación e implementación de soluciones que permitan trabajar con un esquema flexible e híbrido, elaboramos esta encuesta cuyo objetivo es medir el nivel de madurez de las nuevas formas de trabajo en las organizaciones, cuyos resultados esperamos sean un aporte para las empresas”, puntualiza Gustavo Calveiro, socio de Paradigma.

El estudio se hizo principalmente con el objetivo de conocer el nivel de madurez de las organizaciones en cuanto a New Ways of Working, sobre 5 categorías:

-Colaboración y soluciones híbridas

-Personas y Liderazgos

-Organización

-Workspace

-Procesos y smartworking

Para cada una se plantean 5 niveles de madurez. El nivel de madurez se obtiene por categoría del 1 al 5 en función de las respuestas brindadas a lo largo de la encuesta.

Gustavo Calveiro, agrega, además, que la encuesta es una herramienta para acelerar la madurez que impulsó la pandemia y convertir a las empresas en jugadores de ecosistemas digitales, donde establece que hubo tres momentos bien diferenciados: “En el primero se generó una carrera por conectar a los equipos dispersos; posteriormente, por adaptar los procesos y expandir las dinámicas de colaboración para gestionar; y finalmente, la capitalización del aprendizaje y transformación del modelo de operación de las compañías hacia un modelo híbrido con inteligencia”.

Conclusiones y cifras

Algunas de las conclusiones de este estudio fue que la pandemia potenció la adopción de soluciones de colaboración, en una acción de gestión del cambio más grande jamás vista, donde las compañías integraron a sus equipos en los modelos colaborativos, pero que subutilizan el potencial de las soluciones, ya que se focalizaron en superar la crisis, pero no en diferenciarse. Esto se da, porque no hay un diseño definido del trabajo híbrido, con lo cual, al aumentar la presencialidad, se reduce la efectividad y la calidad de la colaboración, y esta calificación disminuye.

En términos de cifras, por ejemplo, en la categoría de Colaboración y Soluciones Híbridas un 80% de las empresas consultadas cuenta con soluciones virtuales de colaboración con una alta intensidad de uso, mientras que un 60% utiliza comunicación periódica que no es sólo informativa y unidireccional. A su vez, un 81% no dispone aún de la totalidad de repositorios integrados, únicos y accesibles, y un 56% mantiene información con un cierto grado de actualización en línea.

Respecto de los desafíos y oportunidades en esa misma categoría, el estudio también entregó datos interesantes, como que el 40% de las empresas encuestadas indicó que no incorporó como práctica habitual la innovación y búsqueda de nuevas tecnologías de colaboración y comunicación, y ese mismo porcentaje señaló que no trabaja aún en planos integrados de comunicación. Y finalmente, un 26% manifestó que aún ocupa el mail como canal de comunicación.

En cuanto a la madurez de las compañías en adoptar las transformaciones digitales necesarias en el actual contexto, para esta misma categoría, la encuesta estableció una puntuación de 3,5, mientras que en el ámbito de Personas y Liderazgos fue de 3,3, en Organización 3,8, en Workspace 2,3 y en Procesos y Smartworking 2,8.

Estos datos dan cuenta de un desafío importante de las empresas para alcanzar una mayor madurez en los procesos de modernización de las compañías y así alcanzar un liderazgo en la economía digital.

“La pandemia impulsó un cambio de alta intensidad en las formas de trabajo, donde hay quienes prefieren trabajar presencial, quienes les encanta hacerlo de forma remota y quienes apuestan por el entorno híbrido para quedarse con lo mejor de ambos mundos. Pero más allá de los gustos personales, las organizaciones deben discernir su “blend” y transformarlo en parte de su propuesta de valor”, concluye Gustavo Calveiro.

>>>Lee la nota también en «La Tercera»